El pasado 11 de febrero participé en el encuentro del voluntariado de Asturias, León y Valladolid, que se realizó en León. Tenía muchas ganas porque entre la pandemia y la coincidencia con otras actividades, la verdad es que llevaba bastante tiempo sin participar en un encuentro de voluntariado. Y ya había ganas.

A las 9 de la mañana (madrugón, pero no me importaba) salimos hacia León cuatro voluntas del grupo de Valladolid. Aprovechamos el viaje para ir haciendo un repaso de las actividades del grupo de Valladolid y también hablar sobre lo que esperábamos del encuentro, y casi sin darnos cuenta ya estábamos en León.

Eran las 11 cuando llegamos. Al entrar vemos a un grupo de nueve socios y socias de León que se han acercado a la reunión de acogida para que conozcan un poco que hace Greenpeace y como poder participar en el voluntariado. Imposible empezar mejor el encuentro, ¡¡con gente nueva que quiere salvar el planeta!!

Comenzamos el encuentro con una dinámica para conocernos mejor y charlar sobre que es lo que más nos ha gustado del voluntariado en los años que llevamos participando. Entonces me di cuenta que he vivido cosas súper interesantes en el voluntariado que son recuerdos para toda la vida, en una lucha que aúna a personas con distintos puntos de vista trabajando por un mundo mejor y en paz.

Toca ahora parar a tomar un café, comer algo, y aprovechar para conocernos un poco más entre todas las personas del encuentro. Un buen rato con buena compañía.

Segunda parte de la mañana y ahora tocar conocer los cambios en el organigrama de Greenpeace, poner el foco en la planificación y en las campañas que están por llegar, para terminar hablando de las actividades más inmediatas y de como abordarlas desde los grupos de voluntariado. Muchas actividades, muy diferentes y todas con muy buena pinta.

Toca ahora ir a comer y aprovechar para charlar sobre que es lo que estamos haciendo cada grupo local, qué funciona, qué no, qué nos gustaría tener, etc, porque por la tarde vamos a trabajar en eso, así que entre plato, conversación y café se nos pasa el tiempo volando y es hora de volver al espacio de trabajo.

Comenzamos con la sesión de trabajo, en este caso hablamos sobre las diferentes líneas de participación que tenemos habilitadas, como los encuentros, campamentos de verano, escuela de activismo, Ágora, etc., y también de todo lo que nos ofrece Greenwire a nivel de grupos temáticos, formaciones, documentación, etc, un sin fin de cosas que tenemos al alcance y que para aquellos que nos gusta el medio ambiente es una maravilla tenerlo a golpe de click, ya que son muchas herramientas útiles que nos permiten disfrutar del voluntariado.

Descanso rápido para comer una pieza de fruta, y comenzamos con la última sesión del encuentro que no es otra que analizar un poco las debilidades y fortalezas de nuestros grupos de voluntariado. Debatimos, escuchamos a otros grupos que es lo qué les funciona, qué es lo que les cuesta más, qué herramientas nos puede facilitar la oficina para poder llegar a más gente, qué podemos hacer nosotros para salir de nuestra zona de confort, y terminamos con propuestas concretas para dar respuestas a estas necesidades, y la verdad es que se nos escapa una sonrisa de ver como el encuentro ha servido justo para lo que queríamos.

Toca despedirse del grupo de Asturias que sale corriendo a coger el tren, pero Valladolid, León y las personas de la oficina tenemos tiempo para recorrer un rato la ciudad de León y probar sus excelentes tapas mientras charlamos sobre el encuentro y de todas las cosas que vamos a hacer la próxima semana para poner en marcha todo lo hablado.

Toca volverse a Valladolid. Me vuelvo con un gran aprendizaje, con ganas de seguir trabajando en todas las actividades que nos han explicado para seguir sumando gente al grupo local y así seguir trabajando por la defensa del medio ambiente y de la paz.

¡Nos vemos en el siguiente!