Supongo que la motivación es el mayor de los motores para cualquier cosa que una persona se proponga. El viernes 14 de abril, en Córdoba, es lo que vi. Mucha gente motivada y preocupada por el agua. Pusimos una mesa informativa para dar a conocer el estado de los acuíferos en España en la plaza de la Corredera. Hablamos de la problemática de la escasez, la contaminación y lo mal gestionada que esta el agua en nuestro país.
Como gancho y aprovechando la ola informativa de la semana, que era que el gobierno de la junta de Andalucía había decidido en pleno conceder 800 hectáreas mas de regadío en la parte norte de Doñana, nos pusimos las camisetas de “Salvemos Doñana” que teníamos de los campamentos de activismo del año pasado y en los chalecos de Greenpeace también pusimos el eslogan. Y en la mesa, los carteles azules tan llamativos y geniales que se han diseñado.
La sorpresa fue que ni siquiera nos dio tiempo a montar el “chirringuito”, la gente empezó a llegar y hacer cola para firmar. No voy a ser un exagerado diciendo que había una cola de espera, pero si es verdad que hubo un momento que todos estábamos ocupados, éramos 7 voluntas, y había personas que tuvieron que esperar para poder firmar. Yo alucinaba que no se fueran, y esperaban. Con esta breve historia lo que quiero explicar es que la gente esta muy motivada y por supuesto preocupada por el tema del agua. Es un tema de mucho calado en Andalucía, principalmente por la agricultura. Y aunque pueda parecer que el trasfondo es un interés económico, no es la sensación que me trasmitía la gente que venía a la mesa a informarse o firmar, estaban realmente preocupados, hacían preguntas sobre qué teníamos pensado hacer en el futuro y se ofrecían a ayudar.
Si esto que nos pasó en Córdoba es el sentir común, pienso que la campaña de aguas esta tomando impulso y os animo a todas a que hagáis la salida y habléis de Doñana, Daimiel, el Mar Menor y que sin agua no existiría la vida, por lo tanto o la protegemos o se acaba todo.
La anécdota del día
Como en cada salida que hacemos siempre hay una novedad o elemento nuevo que por mucho que intentes controlar siempre aparece y lo cambia todo. En esta salida el radicar libre era para mi una nueva voluntaria, Isabel, que se ve una persona potente, con ilusión y preocupada por el medioambiente. Al ser el primer día que salía con nosotros no sabia bien como iba a ser el contacto con la gente, y como se dice en Córdoba, saltó la liebre.
¡¡Despedida de soltero!! Se pasan por la mesa chicos ataviados con un sombreo en forma de campo de golf y le dicen a Isabel que ellos lo que les gustaría es construir un campo de golf en Doñana! ¡Me saltó hasta la alarma del movil! Me acerco y el chico insistía a Isabel en el tema y ella le contestaba con una educación que sería la envidia de un aristócrata ingles tomando el té con un Windsor, y se lo llevó al terreno pantanoso (por lo menos antes lo era) de Doñana. Les explicó la importancia de los humedales, lo que suponía para las aves migratorias y lo importante que es el agua en ese lugar en concreto.
El final de la historia: El chico acabó firmando nuestra petición y nosotros su camiseta de la despedida, que lo hicimos escribiendo “grin pi”, porque no es cosa de que nuestro buen nombre vaya en la camiseta de un chico que ha decidido dejar este buen club de los solteros de oro del que yo formo parte a título perpetuo.